Esta es la segunda parte de nuestra conversación de tres partes sobre el libro de Job. Si Dios es justo, ¿eso significa que el universo tiene que regirse estrictamente por el principio de compensación justa? El libro de Job es un experimento mental perfecto para explorar esa pregunta. Job no ha hecho nada para merecer el sufrimiento que le ha tocado, y Dios reconoce que no hay una razón que justifique lo que le está pasando. Como ser humano, Job reacciona al sufrimiento de muchas maneras diferentes. A veces, confía en Dios y lo alaba, otras veces, lo acusa de ser cruel y poco confiable, imprudente, injusto y corrupto.